El hermoso pueblo de Alaró está situado en el noroeste de Mallorca, al pie de las montañas de Tramuntana. Alaró tiene una población de 4.500 habitantes y es el centro administrativo del municipio del mismo nombre situado lejos de los grandes complejos hoteleros. Además de su tranquilidad y originalidad, encanta a sus habitantes y visitantes con su paisaje natural único. El encantador pueblo está rodeado de un fantástico paisaje de montaña, que se caracteriza por la presencia de higueras, algarrobos, almendros y olivos. Alaró es especialmente conocido por su alta gastronomía, que ofrece a los gourmets lo mejor de la cocina. En los pintorescos callejones hay numerosas pequeñas tiendas de artesanía. En lo alto de Alaró, triunfa la vista más famosa del pueblo: el castillo de Alaró.
Este hermoso lugar se ha convertido con el tiempo en una de las zonas residenciales más populares para los habitantes de Mallorca. Tanto su lejanía como sus fantásticas vistas panorámicas desde el Puig de Alaró, a 825 metros de altura sobre la isla balear, atraen cada vez a más residentes que quieren establecerse en Mallorca en un entorno natural.
Alaró tiene una historia centenaria que le ha dado al pacífico pueblo mucho carácter. En 1241 el pequeño pueblo fue mencionado por primera vez en un documento con el nombre de Oloron. Los historiadores sospechan que el nombre del pueblo tiene un origen ibérico o árabe, aunque la expresión árabe hisn al-rum puede traducirse como "fortaleza romana".
Desde el punto de vista económico, tanto la minería como la producción de calzado desempeñaron un papel importante. Hoy en día los habitantes viven principalmente de la agricultura.
El castillo de Alaró destaca por su destacada importancia estratégica en la historia de Mallorca. Como base de los últimos luchadores por la independencia y debido a su ardua conquista por parte de las tropas de Alfonso III de Aragón, el castillo simboliza la resistencia y la lucha patriótica de los mallorquines por su patria.
Como una de las vistas más interesantes destaca el "Castell d'Alaró". El castillo es un destino muy popular para excursiones y senderismo para gente locales y los turistas de todo el mundo, que pueden admirar las ruinas de la fortaleza desde cerca y disfrutar de una impresionante vista panorámica de la hermosa isla de Baleares.
Alaró es un buen punto de partida para senderismo y maravillosos paseos en la naturaleza por la Sierra de Tramuntana. Por ejemplo, se puede caminar a los picos del Puig de Ofre o del Puig des Tossals Verds.
Los visitantes no deben perderse la visita al mercado semanal, que tiene lugar todos los sábados en la plaza del ayuntamiento. Aquí podrá experimentar de cerca la típica vida mallorquina y quedar impresionado por las frutas y verduras frescas, y los coloridos puestos y las ganas de vivir de los mallorquines.
También vale la pena visitar dos grandes fiestas de pueblo. La "Fiesta Sant Pere" se celebra cada año el 29 de junio y la "Fiesta Sant Roc" el 16 de agosto, cuando el tranquilo pueblo se transforma en un lugar animado con música, bailes y especialidades locales.
Los residentes de Alaro tienen a su disposición una amplia gama de actividades deportivas y de ocio. Se ofrece a los hermosos alrededores naturales del pueblo tradicional, no sólo senderismo, sino también grandes caminos para nordic walking, y la bicicleta de montaña o el ciclismo. Además, los habitantes disfrutan del aire fresco y del paisaje mediterráneo durante extensos paseos.
Los entusiastas de los deportes disfrutaran las buenas equipadas instalaciones deportivas. Además de varias pistas de tenis, los residentes del pueblo se benefician de un campo de fútbol y una piscina.
Uno de los restaurantes más populares es "Es Verger". En esta antigua y auténtica granja de montaña, los clientes pueden disfrutar, entre otras cosas, de las mejores especialidades de cordero mallorquín. El excelente restaurante biovegetariano "Ecosenalla" también ofrece a sus clientes una deliciosa cocina mediterránea del más alto nivel. Ingredientes regionales y frescos forman la base de fantásticas creaciones en un ambiente muy agradable.
Este pueblo de montaña pitoresco es insuperable en belleza. Un paseo por las sinuosas calles del pueblo es simplemente parte de una visita a la isla.
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